Leche Frita

30 minutos más el reposo en la nevera      |      4/5


Es un dulce tradicional de Carnaval y de Semana Santa, un postre casero, de los que gustan mucho. Al estar rebozada y frita, su color es dorado, con un sabor aromatizado y una textura cremosa y fundente en boca. Para su presentación, sencillamente la espolvoreamos de azúcar y canela en polvo.

Ingredientes

500 ml de leche
100 gramos de azúcar
50 gramos de Maizena
1 cáscara de limón
1 canela en rama
Maizena o harina y 2 huevos para rebozar
Aceite de girasol o de oliva suave para freír
1 cucharada de canela en polvo y un poco de azúcar para recubrir una vez rebozada

Preparación

  1. Empezamos poniendo toda la leche (menos una taza que reservamos) en una olla o cazo con la cáscara del limón (previamente bien limpia y sacada las cáscara con un pelador evitando la parte blanca) y la ramita de canela a calentar a fuego medio hasta que hierva.
  2. A continuación apartamos y lo tapamos, dejando que ésta llegue a infusionar durante unos minutos. Le incorporamos el azúcar y removemos bien.
  3. La taza de leche fría que habíamos reservado la mezclaremos con la Maizena removiendo bien para que no queden grumos (que evitarás si viertes la leche sobre la Maizena y no al revés).
  4. Volcaremos la leche con la Maizena sobre el cazo de la leche aromatizada, colándola para retirar la cáscara de limón y la canela. Pondremos a fuego medio removiendo de manera constante durante unos 10-12 minutos hasta que espese.
  5. Ahora ya tendremos molde o fuente rectangular que vamos a utilizar, engrasado con un poco de aceite vegetal, o cubierto con film transparente todo el fondo y paredes (para facilitar después sacar los cortes del molde).
  6. Volcamos la crema en el molde y extendemos de manera que la superficie quede lo más lisa posible, y cubrimos con un film transparente a ras de la crema, para que no cree costra, y lo dejamos enfriar completamente.
  7. A continuación lo meteremos en el frigorífico durante varias horas, o incluso hasta el día siguiente!
  8. Para freír, volcaremos (con cuidado de no romperla) la crema ya cuajada en un plato o bandeja, cortaremos en rectángulos o cuadrados, pasaremos cada trozo por Maizena y huevo batido; freiremos en una sartén con abundante aceite, a fuego medio para que no se nos queme el huevo. Los iremos sacando cuando ya estén dorados y los pondremos en papel absorbente para quitarles cualquier exceso de aceite.
  9. Antes de que se enfríen del todo espolvoreamos azúcar mezclado con una cucharita de canela en polvo.